Hola:
Por mucho que nuestro trato con Olga ha sido esporádico y breve, desde el primer momento nos transmitió la sensación de compartir con ella una vieja amistad, sustentada en valores y convicciones afines.
Amén de la simpatía que desborda, espontánea y natural, nos cautiva la sencillez y entusiasmo de su manera de ser, la fuerza de su carácter y la disposición y voluntad a involucrarse decididamente en las buenas causas, como reflejo de su espíritu combativo y sensible a los retos y problemas que enfrentamos en nuestro país.
Conversar con Olga es un deleite por la chispa de sus comentarios, inteligencia de sus observaciones y la alegría que nos contagia.
Sus sesenta años son testimonio de amor a una vida comprometida y de homenaje a la amistad.
A nuestro afecto, unimos una felicitación calurosa para ella y su familia.
Ignacio y Silvia Villaseñor.